La ruptura de la disciplina de voto por parte de Juan Angel Ferrer en el pleno de los presupuestos pasado, ha sido una de las posturas más decentes hechas por un político en Benidorm desde hace muchos años.

La ruptura de la disciplina de voto por parte de Juan Angel Ferrer en el pleno de los presupuestos pasado, ha sido una de las posturas más decentes hechas por un político en Benidorm desde hace muchos años. Desgraciadamente, estamos acostumbrados a que tanto en ayuntamientos, diputaciones, parlamentos autonómicos y nacionales, todos los que son elegidos, votan como manada de borregos todo lo que les manda el líder de turno.

Y así nos luce el pelo a los administrados, ya que pocas veces miran por los intereses de los ciudadanos, y si por mantener las prebendas que tienen los cargos políticos una vez sentados en la poltrona.

Y ay del que decida obrar en conciencia y saltarse esta disciplina de voto, tiene los días contados dentro del partido o en el cargo que ocupe.

Esto, supongo que lo ha pensado y meditado el Doctor Ferrer, y sabe que le va a traer consecuencias, pero como él ha dicho en su comparecencia ante la prensa, su dignidad está por encima de todo.

Esto en Estados Unidos no pasa, ya que cada cargo es elegido en listas abiertas, y los elegidos tienen solo que dar cuenta a los ciudadanos que les han elegido, por lo que difícilmente van a ir en contra de sus intereses.

En España y en concreto en Benidorm, solo se hace lo que dice Navarro, con tal de que Amor no se cabree y rompa un pacto de gobierno que ha dejado de ser socialista.

Y que conste que yo no estoy de acuerdo con las políticas socialistas que ha hecho Navarro desde que ha llegado al consistorio, porque tienen de socialistas lo que yo de cura, pero creo sinceramente que es para eso que le han votado y puesto en el sillón consistorial y no para vender su alma al diablo con tal de seguir ocupando el sillón de la alcaldía y llevarse el pastón que se lleva todos los meses.

Por eso me congratulo personalmente de que el Doctor Ferrer, haya dejado el rebaño de borregos y haya votado en conciencia y con sus ideales. Políticos así son los que hacen falta en nuestra ciudad.

Fuente: Opinión en el Nuevo Beninoticias